Si bien es cierto que los negocios por internet solían ser un área “gris” para el Servicio de Administración Tributaria (SAT) en México, en los últimos años se han hecho ajustes a las leyes y los regímenes tributarios. Vender por internet es una actividad económica en la que, como cualquier otra que genere un ingreso, se deben pagar impuestos.